Lamentable, indignante, un horror. Un energúmeno, porque no se le puede denominar de ninguna manera jugador de baloncesto, se ha cargado la final four de la 1ª Provincial Senior que se estaba celebrando en Olivares y, lo que es peor, ha mandado a Pascual Colón al hospital. Sí, porque este colegiado, que fue agredido de manera brutal, tiene nombre y apellidos, aunque haya gente que se le olvide ese pequeño detalle en cuanto salte a la cancha.

Tras un primer envite en el que C. Natación se impuso a CB Carmona (54-76), llegó el turno de la segunda semifinal entre CB Olivares y CDB Guillena. A falta de ocho minutos y 15 segundos, un jugador del Guillena se dirigió al árbitro y “le propinó un puñetazo en la cara que lo dejó en el suelo inconsciente”, según consta en la web de la Federación Andaluza de Baloncesto de Sevilla. Los médicos del pabellón de Olivares lo atendieron al instante y, posteriormente, fue trasladado al Hospital San Juan de Dios de Bormujos, donde permanece ingresado.

Pascual sufre traumatismo cranoencefálico con pérdida del conocimiento y trauma cervical. El agresor, por su parte, prestó declaración ante la Policía Local y está pendiente de una denuncia. Su acción ha tenido como reacción la suspensión de la competición hasta nuevo aviso. “Era un buen partido de baloncesto, con un pabellón lleno, con dos aficiones animando a los suyos… hasta que u jugador ha estropeado la fiesta”, señaló el delegado de FAB Sevilla, José Antonio Ruiz, que lamentó los hechos al igual que el CDB Guillena. A esta condena y lamento se une el CB ANRES.

PD: Sólo un detalle… cuando le agredió su equipo iba ganando 60-50.